Este año, muchos tuvimos que adaptarnos a una “nueva rutina” que no se siente normal. Los ajustes súbitos de la vida como este afectan negativamente la salud mental y causan fatiga crónica y agotamiento.
Aún en medio de esto, Dios nos llama a ir a Él, con la promesa de darnos descanso. Una forma de acercarnos a Dios es pasar tiempo en Su Palabra, pero ¿cómo hacer que el tiempo con Dios sea un hábito diario? Y luego, ¿cómo se cierra la brecha entre conocer las Escrituras y vivirlas cada día?
Cinco pasos claves que te ayudarán a pausar, descansar y estudiar la Biblia cada día, incluso cuando te sientes abrumado.
Prepara Tu Corazón
Inicia tu tiempo de quietud leyendo este Salmo, y luego escribe tus inquietudes y problemas. Imagina poner en una caja todo lo que está compitiendo por tu atención, luego entrega esa caja a Dios. (Es posible que debas repetir este proceso varias veces antes de sentirte listo para el siguiente paso.)
Pídele a Dios que te hable
Antes de sumergirte en tu estudio bíblico diario, pídele a Dios que te ayude a entender Su Palabra y cómo aplicarla adecuadamente a tu vida. Él promete darnos Su sabiduría cuando se la pedimos.
Oración por Sabiduría:
Dios, tranquiliza mi mente para poder escucharte claramente. QuieroTu sabiduría mientras estudio este pasaje, para reconocer la verdad bíblica y aplicarla a mi vida. Señor, ayúdame a verte claramente en Tu Palabra. Amén.
Guarda esta oración en tu Biblia
Analiza el pasaje
¿Cuándo fue escrito el pasaje? ¿Quién era la audiencia prevista? ¿Cuál es el tema principal? ¿Hay palabras y frases repetitivas (si es así, ¿por qué?)? ¿Qué te muestra el pasaje sobre el carácter de Dios?
Al comenzar el estudio bíblico, lee el pasaje varias veces, y cada vez responde a una pregunta diferente. Presta especial atención a cualquier frase o idea que te siga llamando la atención.
Resume las Escrituras
¿Qué te resonó mientras leías? Dedique varios minutos a pedirle a Dios que le muestre las verdades en Su Palabra, y luego escriba 1-3 conclusiones clave del pasaje. Esto lo ayudará a procesar y rastrear las ideas que Dios le muestra.
Practica este plan de estudio
Si quieres crecer en la fe, entonces no es suficiente simplemente estudiar la Palabra de Dios. También hay que vivirla.
Escribe dos o tres formas en las que deseas aplicar las Escrituras que estudiaste, y verifica con regularidad tu progreso. Puedes incluso poner tus metas en Oraciones en la Biblia App, ¡y fijar recordatorios para orar por ellas!
Una vez terminado tu estudio bíblico, pasa unos minutos en un reflexión silenciosa y pídele a Dios que te recuerde durante el día todo lo que aprendiste.
Incluso cuando la incertidumbre nos rodea, elegir pasar tiempo con Dios cada día nos ayuda a ver los problemas y el dolor desde Su perspectiva eterna. Y en el proceso, hallaremos descanso para nuestra alma y esperanza renovada para nuestra vida.