Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación.
GÉNESIS 2:3
Descanso — relajarse, pausar, respirar y estar cómodo.
¿Recuerdas la última vez que estuviste calmado, desconectado y relajado? El descanso es un regalo que muy fácilmente rechazamos.
El estar ocupado nos da la sensación de que estamos logrando algo, pero puede ser engañoso. Sin límites realistas, puede ser una droga que nubla nuestra necesidad de acercarnos a Dios: el dador de cada regalo bueno y perfecto.
El temor del Señor conduce a la vida; da un sueño tranquilo y evita los problemas.
PROVERBIOS 19:23
Vivir sin descanso es insostenible. El descanso refresca y da la energía necesaria para honrar y amar a Dios y a los demás. Descansar es una disciplina espiritual que ayuda a alinear las prioridades y a disfrutar la presencia de Dios.
En verdes praderas me hace descansar, a las aguas tranquilas me conduce, me da nuevas fuerzas.
SALMO 23:2-3a
Aquí 3 formas de incorporar el descanso a tu vida diaria:
Concéntrate
En Romanos 12, Pablo nos urge a ser transformados al renovar nuestra mente. Concentrarnos nos ayuda a alinear el corazón y la mente con lo que Dios está haciendo. ¿Dónde te enfocas mejor? ¿En tu sofá con una taza de café? ¿Mientras trotas escuchando alabanzas? Encuentra lo que te hace sentir cerca de Dios, y enfoca tus pensamientos en Él antes de comenzar tu día.
Desafío: Toma de 5 a 10 minutos cada día y recuerda cada preocupación y responsabilidad. Y entrégale en oración todo a Jesús. (Si te sirve, escribe esas cosas)
Reflexiona en las Escrituras
Toda la Escritura es inspirada por Dios. Cuando lees o escuchas la Palabra de Dios y reflexionas en lo que dice, aprendes a reconocer la voz de Dios. Un tiempo especial en la Biblia debe establecer la prioridad de enfocarte solo en la comunión con Jesús.
Desafío: Separa 30 minutos al día para leer o escuchar la Palabra de Dios. Durante ese tiempo, silencia tu calendario y notificaciones. lee un Plan, toma notas y anota tus pensamientos en un diario. Deja que Dios te hable.
Se parte de una Comunidad
Intimidad con Dios no significa aislarse de los demás. De hecho significa apartar un tiempo para ellos. El descanso es la mejor forma de celebrar la vida con las personas que amas. No fuimos hechos para estar solos. Nos necesitamos unos a otros.
Desafío: Cada semana, invierte al menos un par de horas en las personas que amas. Sin agendarte. Solo reúnete y disfruta el tiempo juntos. Luego escribe lo que Dios te ha mostrado durante este tiempo.
Estas son algunas sugerencias para ayudarte a que la intimidad con Dios sea una rutina diaria. Explora otras formas de descansar en uno de los siguientes Planes.
Planes acerca del Descanso
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